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Hoy en día, el sueño de contar con un negocio propio no se concibe sin pasar por el mundo digital. Es por esto que el comercio electrónico surge como la base principal para emprender en un nuevo proyecto. Sin embargo, hay muchas formas de llevarlo a cabo, muchos tipos de ecommerce que nos determinarán qué es lo que queremos hacer.
Por ello, desde BlackBeast hemos querido realizar este artículo en el que te explicamos los tipos de ecommerce más importantes que debes conocer, tanto por el tipo de destinatario como por el producto que vas a comercializar.
Toma buena nota antes de lanzarte y poder elegir así la opción que más te conviene.
¡Comenzamos!
Pero antes, ¿tenemos claro lo que es un ecommerce?
Es vital que antes de hablar de tipos de ecommerce tengamos muy clara su definición, ya que para determinar si algo en lo que realmente debemos invertir, hay que conocerlo.
Un ecommerce es un método de venta, compra y distribución de diferentes productos y servicios a través de Internet. Su razón ser reside en el mundo digital, pudiendo acercar esos productos a usuarios de cualquier rincón del planeta.
Pero, como vemos en su propia definición, esos usuarios son diferentes en cada tipo de ecommerce, así como el objeto de venta, pues variará dependiendo la finalidad de dicho comercio electrónico.
Por todo ello, necesitamos desgranar muy bien los principales tipos de ecommerce, y es lo que vamos a hacer en el siguiente punto.
Los tipos de ecommerce que debes conocer
Ahora sí, una vez que tenemos clara la definición de ecommerce, podemos pasar a hablar de los tipos esenciales que debemos conocer a la hora de montar un negocio.
Tipos de ecommerce según su destinatario
Dependiendo del destinatario final de nuestro negocio, encontraremos diferentes tipos de ecommerce. Es la clasificación más elemental que debemos conocer:
- B2C (Business to Consumer): El más extendido y por el que seguramente muestres más interés. El destinatario final es el consumidor, el usuario personal.
- B2B (Business to Business): Se trata de operaciones de comercio electrónico entre empresas. Pueden llevarse a cabo acciones de compra-venta de productos, búsqueda de proveedores o acuerdos comerciales de otro tipo.
- B2E (Business to Employee): En este caso, el producto comercializado se ofrece desde el ecommerce a empleados que forman parte de la misma empresa. Son negocios muy específicos que se centran en proporcionar ventajas y descuentos a los miembros del mismo equipo.
- C2C (Consumer to Consumer): Es un tipo de ecommerce que pone a los usuarios una plataforma a su disposición para realizar transacciones entre ellos. Ejemplos como negocios de venta de ropa usada o transporte compartido entran dentro de estos tipos de ecommerce.
- C2B (Consumer to Business): Cuando hablamos de un negocio C2B nos referimos a las clases de ecommerce en las que los usuarios ponen sus productos a disposición de empresas interesadas en comprarlos.
- C2A (Consumer to Administration): En estos tipos de ecommerce tienen lugar operaciones entre los consumidores y la Administración Pública. Básicamente, se actúa como canal para acciones como trámites burocráticos, declaraciones de la renta, cursos a distancia…etc.
- B2A (Business to Administration): Al igual que ocurre con el tipo de ecommerce anterior, entra en juego la Administración Pública, solo que en esta ocasión las operaciones se realizan con una empresa. Y las acciones tiene el mismo carácter que en el tipo anterior, es decir, docencia, empleo, temas fiscales…etc.
Tipos de ecommerce según el objeto comercializado
Otra de las divisiones más básicas a la hora de determinar los tipos de ecommerce, se centra en el objeto que se va a comercializar. Es una división realmente sencilla a la par que importante, ya que determina la finalidad de nuestro comercio electrónico:
- Ecommerce de productos físicos: En estos tipos de ecommerce el producto físico llega al destinatario a la dirección deseada. A su vez, en este tipo de ecommerce encontramos la opción del dropshipping, un modelo en el que lo que se comercializan son los productos de un proveedor, dejando en sus manos el envío y el stock.
- Ecommerce de productos digitales: Su proceso es mucho más sencillo respecto al ecommerce de productos físicos, pues el destinatario obtiene lo que compra al instante. Además, eliminar el proceso de una entrega física, ahorra muchos costes, por lo que se debe tener muy en cuenta. Música, vídeos, plantillas, archivos, imágenes… son elementos que pueden ser comercializados de manera digital.
- Ecommerce de servicios: Dentro de este tipo de ecommerce se encuadran desde cursos hasta venta de entradas para un concierto o una exposición. Incluso puedes vender servicios de terceros, a través de campañas de afiliación que muchas empresas ponen a disposición de todo el mundo.
¿Cómo elijo mi tipo de ecommerce?
La división que hemos visto ahora mismo, es la más esencial que debemos tener en cuenta a la hora de decidirnos por un tipo de comercio electrónico u otro. Pero, ¿cómo enfocar nuestro negocio online cuando no tenemos realmente una idea en claro?
Con estas claves trataremos de aclarar nuestras ideas a la hora de montar un ecommerce:
Qué quieres vender en tu ecommerce
Lo primero en lo que debemos detenernos y lo que, probablemente, sea el pilar fundamental de tu ecommerce. Debemos saber qué nos gustaría vender antes de nada.
Si dudamos, podemos tener en cuenta que el producto físico sigue siendo un verdadero filón de cara a los consumidores. Eso sí, no podemos olvidar que los costes y el cuidado en el envío de los mismos van a ser más altos que con otros productos.
Si dispones de muchos conocimientos y recursos que se pueden compartir sin necesidad de un canal de distribución, comercializa productos digitales.
Cómo lo quieres vender
Es otro punto importante a la hora de decidirnos: ¿Quieres vender algo directamente? ¿Necesitas que transporten esos productos que comercializas?
En este punto aparece la posibilidad de decidirnos o no por el dropshipping antes comentado, donde puede resultar más cómodo vender productos de un proveedor que se encargue de tareas como el reparto o el control de stock.
A quién se lo quieres vender
Otro tema esencial y que hemos ido viendo al dividir los tipos de ecommerce. Saber el destinatario de nuestro negocio determinará la forma de establecer nuestro comercio electrónico.
¿Vas a vender a consumidores o quieres que tus productos se comercialicen para empresas? ¿Tal vez un ecommerce que haga de plataforma intermediaria entre usuarios?
Al contestar a estas preguntas, estaremos dando con el tipo de ecommerce que necesitamos. Recuerda que si quieres montar tu ecommerce de manera eficiente, en BlackBeast somos expertos en lanzar comercios online. Contacta con nosotros y descúbrelo.