Concepto de Navegadores
¿Qué son los Navegadores?
Los navegadores son programas (software) que te permiten acceder a Internet. Mediante ellos, podemos navegar por la red, conocer el contenido de otros navegadores y realizar diversas tareas, como ver vídeos, revisar correos, buscar información… etc. Todo esto solo con introducir o clicar sobre la dirección deseada.
La función principal del navegador es mostrar e interpretar la información que se solicita. Su uso se ha hecho algo muy común hoy en día. Los navegadores se van adaptando permanentemente a las nuevas tecnologías mediante actualizaciones constantes y nuevos plugins que añaden funcionalidades y herramientas.
Para qué sirven los Navegadores
Sirven para conectarnos con la web permitiéndonos navegar por ella, así como también realizar distintas acciones a nivel digital. Sin los navegadores, sería prácticamente imposible establecer la conexión a Internet.
Desde el punto de vista empresarial, además de ayudar a la búsqueda de información en el sitio web, cumplen un rol fundamental para dar a conocer una marca.
Ejemplos de Navegadores
Entre los navegadores más conocidos se encuentran Google Chrome, Mozilla Firefox, Safari, Opera e Internet Explorer.
El navegador de Google se encuentra entre los más veloces y seguros. Google Chrome tiene la ventaja de sincronizarse con todas las plataformas y mediante sus extensiones mejora aún más su efectividad, además de ser propietario de la plataforma Android, por lo que puede sincronizarse fácilmente con cualquier dispositivo móvil que use este sistema operativo.
Para Opera, los requisitos de funcionamiento son mínimos, por lo que los ordenadores con poca potencia no tendrán dificultad en su uso. Su popularidad es más bien limitada, ya que su principal ventaja es precisamente su austeridad, que hace que consuma escasa cantidad de datos y que apenas exija la capacidad de procesamiento del dispositivo.
Safari es un excelente navegador, aunque es propiedad de Apple, por lo que solo funcionará en dispositivos con iOS.
Mozilla FireFox es anterior a Google y solía ser la mejor alternativa a Internet Explorer antes de la aparición de Chrome. Es más seguro, rápido y personalizable que Internet Explorer, y cuenta con la ventaja de estar basado completamente en HTML, por lo que no requiere los tiempos de carga y el uso de RAM que se asocian habitualmente a Flash Player. Es un buen navegador pero no con la capacidad de extensiones de Google.
Más información sobre los navegadores
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